En Bolivia, se ha presentado el proyecto de ley denominado "Ley de Implementación del Cannabis y sus Derivados para uso Medicinal y Terapéutico en Bolivia" (el ¨Proyecto¨). El proyecto busca regular el uso medicinal y terapéutico del cannabis en el país, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los pacientes. Actualmente, existe un mercado negro para adquirir cannabis medicinal, lo que lleva a que los pacientes y sus familias desafíen la ley vigente.
El Proyecto propuesto consta de seis artículos y una disposición que buscan generar espacios de debate para recabar diferentes perspectivas y opiniones. Se enfoca en la salud pública y el acceso a una vida digna para los pacientes. El Proyecto también plantea la posibilidad de permitir el autocultivo de cannabis como una forma de acceso directo para los pacientes, especialmente aquellos que elaboran su propia medicina de manera artesanal.
Los participantes en el diálogo sobre la regulación de las drogas y el Proyecto destacaron la importancia de cambiar el enfoque prohibicionista de las políticas de drogas. Mencionaron que el uso medicinal del cannabis está respaldado por organismos internacionales como lo es la Organización de las Naciones Unidas que, el 2020 a través de la Comisión de Estupefacientes retiró el cannabis de la Lista IV de la Convención sobre drogas de 1961. De esta manera, concluyen que no existe una objeción a regularlo. Sin embargo, el debate sobre el uso recreativo del cannabis no se incluye en el Proyecto.
Los expertos también señalaron que la despenalización del cannabis medicinal podría tener beneficios adicionales, como la reducción de la corrupción y la generación de ingresos a través de la exportación legal. Además, destacaron la importancia de aprender de experiencias de otros países y adaptar las mejores prácticas a la realidad nacional.
En resumen, el proyecto propuesto busca regular el uso medicinal y terapéutico del cannabis en Bolivia, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los pacientes y combatir el mercado negro. Sin embargo, en el Proyecto se excluye el debate sobre el uso recreativo del cannabis.